MONSEÑOR LUNA VIVE EN SUS OBRAS
Monseñor Luis Alberto Luna, logró sembrar en buena tierra; sus semillas nacieron y viven en las múltiples obras que inició e inspiró desde los tiempos en que fue obispo de Cuenca. Para celebrar este camino y la vida de Luna, se llevó a cabo la Casa Abierta de Organizaciones Sociales que, trabajan al servicio de los grupos menos favorecidos de la sociedad. Estas organizaciones, motivadas por el compromiso de Luna con la justicia, la dignidad y la promoción humana, se caracterizan por actuar con amor, honestidad y solidaridad ante las necesidades de los demás. Luna, impulsó el servicio desde la Iglesia y lo hizo con múltiples iniciativas en atención a diversos grupos humanos postergados históricamente como los campesinos, las mujeres, los niños, los enfermos, los desamparados, los presos, los perseguidos o los migrantes.
El reencuentro fue muy emotivo y contó con la presencia de diversas instituciones que se dieron cita en los patios del Seminario San Luis el pasado jueves 31 de agosto, muchas de ellas existen desde hace muchos años como CECCA, DONUM, FEPP, JARDIN AZUAYO y otras fueron surgiendo posteriormente como CASA MARIA AMOR, EL ARENAL Y CREA TU ESPACIO.
El Centro de Educación y capacitación campesina del Azuay (CECCA), nació hace más de 40 años en la zona sur de la provincia del Azuay con el objetivo de defender los derechos de los campesinos que se organizaron en la lucha por la tierra, y estaban siendo acusados por el gobierno ecuatoriano de aquella época, de ser comunistas. Luna fue presidente del CECCA y junto con el P. Hernán Rodas, acompañaron a las comunidades campesinas a continuar su lucha. El CECCA, publicó por largos años el boletín Iglesia- Campo, que constituyó un referente del pensamiento de la iglesia comunidad en el Azuay, generando una dinamización del movimiento popular campesino y sindical a lo largo y ancho de la provincia.
El Fondo Ecuatoriano Populorum Progressio (FEPP), nació en 1970 como una iniciativa de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana. Su fundador fue monseñor Cándido Rada. Institución al servicio de la población rural, indígenas, afroecuatorianos, montubios, mestizos, pobladores urbano marginales, y pobres en general. Su objetivo es brindar educación, recursos financieros, fuentes de trabajo, conservación del medio ambiente, equidad de género, incidencia política, bienestar; y contribuye a crear esperanza, justicia, paz y condiciones de vida más humanas. Esta organización siempre contó con el apoyo y el respaldo de Monseñor Luna en sus proyectos.
Otra obra de gran importancia constituye la Fundación DONUM, que significa DON; fundada por el mismo Luna, cuyo lema es gestionar la solidaridad para la autogestión y el desarrollo. DONUM cuenta con un centro de atención medica desde hace más de 30 años, en el que ofrece servicios a costos populares, bajo la dirección de Soc. Juan Cuvi. Esta obra continúa creciendo coherente con los principios y valores de calidad y calidez en la atención a los más necesitados.
La cooperativa de Ahorro y Crédito Jardín Azuayo (JA), surgió en 1996, en el contexto del desastre de La Josefina, con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de las comunidades a través de servicios financieros y educación cooperativa. El deslizamiento de la Josefina contó con el apoyo cientos de personas, instituciones y por supuesto de la Curia de Cuenca que asumió la coordinación bajo el liderazgo de Monseñor Luna quien imprimió el espíritu solidario y humanitario en el trabajo de reconstrucción. El CECCA tuvo un rol fundamental coordinando la participación las organizaciones de base del Cantón Paute. El tema del financiamiento y autofinanciamiento fueron fundamentales para retener los ahorros locales y las remesas de los familiares en el exterior, y para ello, en febrero de 1996 se decidió crear la Cooperativa Jardín Azuayo, siendo nombrado presidente el P. Hernán Rodas y Tesorero el Eco. Paciente Vázquez.
A finales de los noventa, las organizaciones de mujeres se habían fortalecido y demandaban respuestas del Estado frente a la grave realidad de violencia intrafamiliar; sin embargo, esta respuesta no llegó. En este contexto, Luna y Belén Andrade implementan la pastoral de la Mujer, que abordaba temas de las mujeres en la Iglesia y en la sociedad, ahí las hermanas Lourdes y Aida Siguencia, proponen que la Iglesia de Cuenca cuente con una casa de acogida para mujeres que sufren violencia. Apoyadas por Luna y la Vicaria de Pastoral social, se gestiona el apoyo de Caritas Austria para comprar una casa donde se pueda recibir a estas mujeres. La Pastoral Social convoca a un concurso para contratar una profesional con experiencia en el tema, para que asuma la administración de esta iniciativa, naciendo lo que hoy es la Fundación Casa María Amor, bajo la dirección de la Ing. Marlene Villavicencio. Mas tarde, la Pastoral Social compra un nuevo espacio para fortalecer el trabajo, hoy se denomina Nina Huasi. La defensa de las mujeres por parte de Luna se manifiesta en esta obra, que hoy gracias a la excelente administración de Marlene y Blanca Pacheco, constituye un referente a nivel nacional e internacional.
La Fundación Crea Tu espacio, es otra de las intuiciones que asume el legado de Monseñor Luna. Nace en 2009 bajo la iniciativa de Franklin Ortiz. Es una organización social que exige, acompaña y vela por los derechos de los niños, niñas, adolescentes, jóvenes y sus familias que están o viven procesos de Movilidad Humana. También ofrece espacios de integración, reconocimiento e involucramiento ciudadano de estas poblaciones, con el objetivo de construir sociedades más proactivas e integradoras con ellos y ellas. Una de las grandes preocupaciones de Luna fue el doloroso éxodo de nuestros migrantes, que abandonaban el país en condiciones de inseguridad. Azuay es una de las provincias con más altos niveles de migración. Luna, a través del Pastoral Social promovió el acompañamiento a las familias que se fragmentaron con la distancia y el dolor de las ausencias. Se podría decir que la Fundación Crea tu Espacio, es la tercera generación de esta obra social que inspiró Luna en el tema de la movilidad humana.
El trabajo infantil constituye un flagelo que siempre conmovió a Monseñor.La fundación el Arenal, dedicada a la atención a los niños trabajadores del mercado el Arenal, nació con los hermanos John y Patricia Valarezo, pero de igual forma contó con el apoyo de Monseñor y de igual forma se mantiene en el tiempo al servicio de los niños y las niñas trabajadoras.
Son muchas las obras sociales que perduran aun después de la partida de quien fuera su inspirador. Lo valioso de este evento, fue la posibilidad del reencuentro entre quienes seguimos soñando y trabajando por un mundo más humano y solidario bajo la motivación y la memoria de Monseñor Luna.
Ex directora y docente de Sociología de la Universidad de Cuenca. Master en Psicología Organizacional por la Universidad Católica de Lovaina-Bélgica. Master en investigación Social Participativa por la Universidad Complutense de Madrid. Activista por la defensa de los derechos colectivos, Miembro del colectivo ciudadano “Cuenca ciudad para vivir”, y del Cabildo por la Defensa del Agua. Investigadora en temas de Derecho a la ciudad, Sociología Urbana, Sociología Política y Género.