Una reciente publicación internacional de prensa, fruto de una alianza de medios de comunicación de varios países revela que personajes conocidos, entre empresarios, políticos, artistas, futbolistas y aun el escritor Mario Vargas Llosa, aparecen como depositarios de dinero e inversiones fuera de sus países de residencia. La publicación menciona al actual presidente, Guillermo Lasso.
En Colombia, pasa con los expresidentes Gaviria y Pastrana; en Chile, con el presidente Piñera. Del presidente de Ecuador se dice que poseía catorce inversiones en Panamá, antes de ser candidato, de las que ha reconocido diez. Sus inversiones fuera del país las atribuye a que, durante el correísmo, los banqueros estaban impedidos de invertir en otra cosa que no sea la banca. Hasta ahí es cierto.
Ahora, la línea general de la serie de reportajes publicados en España y Latinoamérica apunta a que estos personajes invirtieron fuera de donde viven para evitar pagar o en todo caso pagar menos impuestos sobre su riqueza. En este caso, el primer mandatario está obligado a dar transparencia a su situación.
Guillermo Lasso no es un político devenido en rico, pues, antes de ser elegido, según sus declaraciones de bienes, se estimó su patrimonio en unos 40 millones de dólares; y, según el Servicio de Rentas Internas, en su última declaración de impuestos pagó, por renta, 2 millones 233 mil 536 dólares. Mientras, en los últimos diez años, ha pagado al Estado por impuesto a la renta 14 millones 271 mil 386 dólares; y por salida de divisas unos 16.000 dólares en igual período.
Siendo como es, el presidente Lasso, un empresario de las finanzas y accionista principal de uno de los mayores bancos del país, no es ninguna novedad que haya tenido inversiones afuera, las llamadas off shore, de las que, según información pública, se deshizo para ser candidato. Lo que le corresponde aclarar, es que, efectivamente, pagó los impuestos respectivos por el rendimiento económico que esas inversiones proporcionaron, ya sea a él o a sus titulares.
Como primer mandatario, investido por su cargo de atacar la corrupción, debe así mismo ser ejemplo de ello y, para que a nadie le quede dudas, sería saludable que publique sus declaraciones de impuestos por renta, digamos de los últimos diez años, en las que, al menos en teoría, deberían figurar esas inversiones.
A los reportajes que aparecen en medios de prensa del continente y a se le ha llamado “Pandora Papers”, los “Papeles de Pandora”. En la mitología griega, Pandora fue una mujer, creada por los dioses, a quien dieron una caja que nunca debía abrir. Vencida por la curiosidad, la abrió y escaparon todos los males del mundo. Es de suponer que esta primera tanda de papeles publicados sea más larga, porque los males son infinitos…(O)
Periodista, comunicador social, abogado. Hoy, independiente. Laboré 27 años en medios locales como editor, redactor y reportero. Diarios El Mercurio, La Tarde y El Tiempo; revista Tres de Noviembre del Concejo Cantonal de Cuenca; radios El Mercurio, Cuenca y América.